Si de low cost hablamos, no puede faltar una de las aerolíneas de este tipo mas conocidas en Europa, Ryanair. Y es que debo admitir que, pese a que la aerolínea recibe críticas debido a sus ya famosas políticas de equipaje; comodidad en el avión, etc, esta es una de las aerolíneas con la que mas viajo, no solo por el coste de los billetes, si no también por la experiencia que he tenido cuando he volado con esta.
Los billetes entre Marzo y Abril salían por unos 28€ ida y vuelta, un sábado, con unos horarios que al menos a mí me parecían estupendos: BCN-IBZ a las 6:40a.m y IBZ-BCN a las 22:35p.m.
Llegamos con bastante antelación al aeropuerto, pasamos los controles de seguridad con bastante rapidez (me sorprendí al ver que a las 6am hubiera tanta gente ya en el control de seguridad) y nos dirigimos a la puerta de embarque. Ya allí, y con planes de tomar un café antes de salir del vuelo, vi que no había absolutamente nada abierto en la zona, así que tuve que esperar a llegar a Ibiza.
El embarque comenzó muy puntual, a las 6:10a.m ya había empezado el embarque prácticamente y pocos minutos después nos encontrábamos ya en un avión (EI-FIO) bastante lleno y sin Sky Interior pero con los asientos nuevos de Ryanair (mas finos).
El vuelo fue muy agradable, salimos por la 25L y alcanzamos crucero poco después. No hay apenas turbulencias y el trato es agradable. La duración fueron unos 50 minutos llegando 5 minutos aproximadamente antes de la hora programada.
Al aterrizar, y a causa del viento que soplaba con fuerza, el avión se movió mas de lo esperado causando el miedo de algunos de los pasajeros, pero los pilotos como profesionales que son, realizaron una buena toma que fue recibida por los pasajeros con algunos aplausos.
Desembarcamos del avión, con una sonrisa en la cara, antes de lo esperado, y por finger.
En conclusión mi valoración para este corto pero mas que interesante vuelo es positiva, siempre, claro está, desde mi humilde punto de vista.
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